Siestas
Dar una cabezadita demasiado tarde o una siesta demasiado larga puede hacer que no te sea posible conciliar el sueño y mantenerte despierto/a durante la noche.
BIENESTAR
Tomar cafeína 6 horas antes de acostarse puede afectar a tu sueño.
El descanso es una parte fundamental en nuestro día a día. Dormir bien hace que afrontemos el día con una actitud más positiva, pero ¿qué podemos hacer cuando tenemos dolor de espalda o de cuello y no podemos dormir bien? A continuación, te explicamos cómo puedes mejorar la calidad del sueño y, por tanto, tu bienestar.
¿Qué se necesita para conseguir ese sueño continuo y de buena calidad que todos necesitamos para reparar cuerpo y mente? ¿El tipo de sueño que calma los dolores y preocupaciones del día y revitaliza cuerpo, mente y alma? ¡Sigue leyendo!
En general, una noche de sueño reparador se basa en una única cosa: el tiempo. Esto significa, en parte, dormir un número de horas suficiente todas las noches, que para la mayoría de los adultos, es entre 7 y 9 horas. También significa mantener el reloj biológico (el llamado ritmo circadiano) regulado, para lo cual tendrás que acostarte y levantarte a la misma hora todos los días. Esta regularidad ayuda a que tu reloj biológico pueda predecir los patrones de sueño y así puedas conciliar el sueño, permanecer dormido y despertarte renovado. Por supuesto, luego la vida va por libre, así que no te estreses demasiado si no sigues estos horarios algunas veces. Eso sí, intenta volver a la rutina lo antes posible.
A continuación, te indicamos algunas cosas que quizá no debas hacer en las horas previas a la hora de acostarte para que consigas mantener un patrón de sueño regular y puedas dormir sin dolor:
Has hecho todo para dormir mejor esta noche, no dejes que el dolor lo sabotee ahora. A veces, un simple cambio de posición puede ayudarte a dormir sin dolor. Si sufres dolor de espalda, cuello u hombro, intenta dormir de lado con una almohada entre las rodillas.
Otra alternativa es dormir boca arriba para mantener las cervicales rectas y dotar de una mayor salud a tu postura a la hora de dormir. Además, si sufres de dolor en el cuello o en la espalda, puedes intentar hacer estiramientos antes de irte a dormir para, de este modo, rebajar la tensión de los músculos de la zona.
La estimulación en general no es buena para el cerebro o el cuerpo justo antes de acostarte. Si puedes, aproximadamente una hora antes de acostarte deja de hacer cosas como ver la televisión y usar juegos electrónicos, así como actividades estresantes como trabajar o pagar facturas.
¿Que cómo puedes desconectar? Pues prueba a darte un baño o lee un buen libro, pero ten cuidado de que no sea demasiado bueno, ¡o te pasarás despierto/a toda la noche leyendo! Si tiene muchas cosas en la mente antes de acostarte, te ayudará si las escribes. Y si habitualmente te resulta difícil relajarte para dormir, prueba con estos consejos.
El ambiente del dormitorio es una de las partes más importantes, pero que suelen pasarse por alto, para lograr una buena noche de sueño. Si no sueles hacer la cama, empieza a hacerlo. Mejor aún, mantén ordenada toda la habitación, porque entrar en un dormitorio ordenado puede mejorar el sueño, descansar y por lo tanto, evitar levantarse con dolor de cabeza. Pero no solo lo decimos nosotros:
El 62 % de los participantes en una encuesta de la Fundación Nacional del Sueño dice que tener la habitación ordenada le ayuda a dormir mejor.
El 19 % de los que se hacen la cama todas las mañanas tenía más probabilidades de dormir bien cada noche.
Todos los días, personas como tú también dicen que tener una almohada y un colchón adecuados, unas sábanas delicadas, unas temperaturas frescas y una habitación a oscuras les ayudan a dormir mejor.